César «D», exgobernador priista de Chihuahua, acusado de peculado agravado por haber sustraído miles de millones de pesos del erario, fue enviado a prisión domiciliaria, donde continuará su proceso penal, con las comodidades que implica vivir en un exclusivo fraccionamiento en la capital del estado.
La jueza dictó las nuevas medidas cautelares para el ex mandatario estatal y consideró que a pesar de estar acusado de un delito grave, no es ya necesario que esté en prisión, pues dos años fueron suficientes.
El exgobernador deberá recluirse en su residencia, portar un dispositivo electrónico oculto en su tobillo y no podrá salir de la ciudad de Chihuahua.
Además, para evitar que intente huir del país, como ya lo hizo al trasladarse en secreto a los Estados unidos donde fundó varias empresas, el exmandatario deberá entregar su pasaporte y visa al juzgado donde se lleva su proceso.