Roberto Castro Chinchilla, habitante de la colonia Playa Linda en la zona norte de la ciudad de Veracruz, reclama la Pensión del Bienestar que no ha podido cobrar porque fue dado de baja, supuestamente tras haber sido declarado como «muerto».
En entrevista acusó que presuntamente sus vecinos notificaron ante la Secretaría del Bienestar que había fallecido por lo que el último pago (que se está realizando en este mes de julio) no lo ha podido recibir.
Cuando acudió al cajero para retirar los 6 mil pesos correspondientes al bimestre julio-agosto observó que no tenía recursos disponibles por lo que fue al módulo ubicado en el Fraccionamiento Flores y ahí le dijeron que ya no era beneficiario.
«La otra vez ya me habían dado de baja porque según yo estaba muerto, ahora ya agarraron el vacilón, como no soy de aquí me quieren fregar».
La última vez que cobró fue en los primeros meses del 2024 cuando el gobierno federal adelantó la emisión de recursos por las elecciones del 2 de junio.
Con un bastón y 78 años a cuestas, Roberto Castro explica que está enfermo; usa un marcapasos por problemas cardiacos; y hace tres años fue operado del estómago por el cáncer que ha enfrentado.
Nació en Costa Rica pero desde hace aproximadamente 40 años radica en México. En el 2008 obtuvo la carta de naturalización y desde entonces cuenta con su credencial de elector para el ejercicio de los derechos que le otorga la Ley.
Tras exponer su inconformidad en la Secretaría del Bienestar de nuevo lo dieron de alta para la Pensión, le entregaron un cintillo en donde le marcaron las opciones de «Corrección o actualización de datos» y «Revisión de datos del padrón».
Sin embargo, subraya que el procedimiento podría tardar varios meses para que el apoyo sea reactivado y mientras tanto no cuenta con recursos económicos por lo que pide que se agilice